Al otro lado del charco, algunas famosas ya han sacado sus disfraces, que a lo mejor pueden serviros de inspiración si aún no os habéis decidido.
Paris Hilton, como buena amante de las fiestas, no podía perderse Halloween y ella y su novio se disfrazaron de personajes de Alicia en el país de las maravillas. Eso sí, con el personal toque de Paris.
Otra pareja: Christina Aguilera y su novio. Él de caballero de brillante armadura y ella de... no lo sé. Por más que he mirado la foto no soy capaz de averiguar de qué va exactamente disfrazada, ¿de princesa/calabaza, tal vez?
Jessica Alba & family de Los Increibles. ¡Me encantan!
Pero sin duda, mi debilidad es Heidi Klum. Sus disfraces para Halloween ya se han convertido en una tradición muy esperada, y es que cada año se supera. Este año ha elegido un disfraz de diosa egipcia, y el resultado ha sido espectacular.
Estos disfraces pueden resultar más o menos originales, pero la verdad es que no son muy terroríficos. Así pues, os doy la bienvenida a mi túnel del terror de la moda, donde la realidad supera a la ficción!
Empezamos por lo fácil: los looks de cantantes como Lady Gaga, Nicki Minaj o Rihanna, que merecen ser copiados como disfraces de Halloween, y es que ella mismas son auténticos personajes. De hecho, hace un par de años el disfraz de Lady Gaga para Halloween fue lo más de lo más.
Seguimos con el caso de Helena Bonham Carter. Ya sea para salir a la calle o para pisar la alfombra roja, ella es fiel a su estilo que parece sacado de una película de su marido, Tim Burton.
Una famosa que últimamente da mucho miedo es Miley Cyrus. Hace bastante que Miley decidió terminar con Hanna Montana a base de enseñar chicha, pero en los últimos tiempos ha querido darle un punto más hortera rebelde que asusta bastante, la verdad.
Otra que también dejó atrás la imagen de niña es Taylor Momsen, más conocida como Jenny Humphrey en Gossip Girl. Taylor dejó de ser la niña buena de papá para convertirse en la hija de Satán, y cambió el uniforme pijo del Upper East Side por el estilo enterrador gótico.
Pero aquí no termina el túnel de los horrores, no. También tenemos los espeluznantes casos de aquellas famosas que siempre (o casi siempre) aciertan con sus looks, pero que en un algún momento fueron abducidas por extraterrestres enemigos del buen gusto. Este es el caso de Cate Blanchett, quien un día decidió usar la manta del sofá de mi abuela como vestido (en serio, mi abuela tenía una manta así en el sofá).
O Leighton Meester. Sí, nuestra querida Blair Waldorf también cometió un crimen de la moda el día que se pasó de moderna y se puso esto. Menos mal que no ha vuelto a reincidir.
Eva Longoria es inseparable de sus tacones, pero un día se olvidó de ellos y no encontró nada más a mano que estas zapatillas (el tema chándal lo dejamos a un lado).
Y para terminar, un ejemplo patrio: Pilar Rubio. En un museo de los horrores merecen estar algunos de sus modelitos, como el look rockera/country o el que lució en los TP de oro del año 2008, cuando se dejó el forro del vestido en casa.
Hasta aquí mi túnel de los horrores fashion, espero que esta noche podáis dormir después de ésto. ¡Feliz Halloween!